Europa no es una moneda

Europa is geen munt!

 

Europa no es una moneda.

El continente Europeo es el conjunto humano más concentrado del mundo de conocimiento y aprendizaje sobre cultura, historia, filosofía, sociedad, ciencia, arte, idiomas, entendimiento e intercambio entre pueblos diversos y heterogeneos. Un conocimiento duramente acumulado a lo largo de las generaciones y los siglos . Es esta esencia la que caracteriza a los Europeos y le brinde fuerza a una Europa unida, no una moneda, ni la economía, ni los poderes financieros o industriales, ni la Troika . La fuerza de Europa reside en los valores humanos reales y colectivos, no en artificiales valores financieros, "calculables" y manipulables por oscuras entidades centralizadas y elitistas.

 

Los valores financieros son artificiales, absurdos y en el fondo irrelevantes

Partiendo desde los valores financieros, enfocados únicamente a un ilimitado crecimiento del produccionismo (propagandísticamente llamado "consumismo"), es lógico que el Euro no funciona.
Pero es absurdo creer que la única intención del Euro fuera: convertir Europa en una masa uniforme, con el fin de tener un solo mercado homogéneo, únicamente para favorecer a los sodichos "Mercados"' (bancos, bolsas, especuladores y multinacionales)! Y si la Troika sigue dejándose manipular por esos mismos Mercados, pretendiendo que desde Hammerfest hasta Yerapetra se viva, se actue e incluso se sienta de la misma manera (según los criterios cortitos del Corporativismo), entonces evidencian definitivamente que no son más que unos inconscientes, torpes e inútiles, que no sirven a un Europa como conjunto de pueblos y directamente se pueden marchar todos a casa. Es imposible pretender que se pueda sencillamente pisar, aplastar y olvidar siglos de cultura y costumbres de una diversidad de pueblos y países tan lleno de contrastes, para convertirlo todo en una especie de palido queso industrial, que ni siquiera contiene leche de verdad, como si de otro Estados Unidos de America se tratara.
Esa no fue, en absoluto, la filosofía original de los fundadores de la Unión Europea y muy probablemente tampoco de la población del Viejo Continente, aunque nadie se ha preocupado nunca para preguntárselo.

La Americanización de Europa (www.attac.es)
No hay plena conciencia en amplios círculos progresistas de nuestro país [y otros países de Europa] de que lo que está pasando en Europa es la “americanización de este continente”, resultado de la generalización de políticas públicas de claro corte neoliberal que los gobiernos europeos están aplicando e imponiendo a sus poblaciones, siguiendo el mandato de la Troika, es decir, del Fondo Monetario Internacional (FMI), de la Comisión Europea y del Banco Central Europeo.

La madurez de Europa

Europa, el 'viejo' continente, es el más pequeño del mundo, pero amplia y rica en valores diversos, pero reales, al contrario del valor único, artificial y manipulado del dinero. Se trata de valores humanos y sociales que se han ido forjando durante decenas de generaciones consecutivas, en base a ensayo y error, a lo largo de muchos siglos. Es el continente que ha conocido más guerras y batallas por kilómetro cuadrado que ningún otro continente, pero que finalmente ha sabido alcanzar la suficiente madurez como para convertirse en el conjunto de países (UE) que más tiempo de paz continuado haya conocido en toda la historia humana.

Es en esa madurez, y la correspondiente conciencia, en la que realmente se unen los países de Europa y sus ciudadanos. Es este concepto, y su correspondiente sentimiento, lo que debería guíar a los políticos y del que podrían (deberían) sacar más provecho y utilidad, sobre todo sirviendo como referencia para el resto del mundo, en vez del triste y fracasado enfoque limitado económico-financiero-especulativo de los bancos.

 

Europa tiene las riendas para salir del yugo del produccionismo

De hecho, es precisamente Europa la que podria y debería tomar las riendas para salir de la espiral negativa global en la que el Produccionismo (materialismo/capitalismo/neo-liberalismo/corporativismo/consumismo...) tiene sumergida a la sociedad global, con su desastrosa filosofia que justifica explotar y agotar todos los recursos disponibles, tanto humanos como naturales, propios y ajenos, sin escrúpulos ni preocuparse por las consecuencias, mientras genere benificios (más o menos suculentos) para su cúpula dirigente (el 1%). Esta filosofía de la Gran Industria, fuertemente apoyada en la corrupción, está llevando a la destrucción del planeta y de la sociedad, que se hará total en esta o la próxima generación si no se reduce drásticamente ya mismo!

Precisamente en Europa confluye un alto y creciente grado de esta conciencia social (tal vez en parte, por ser el continente donde más espacio natural se haya destruido) con un alto grado de industrialización (causa de dicha destrucción). Por lo tanto es en Europa donde más se enfrentan la Gran Industria y los múltiples partidos y movimientos verdes, alternativos, ecológicos y de democracia verdadera que representan valores humanos reales.

Puede que esto sí sea una nueva batalla en Europa, y tal vez la definitiva, ya no entre pueblos, sino entre una nueva visión de mundo y sociedad de ciudadanos concienciados por un lado, y la industria abusiva y destructiva junto con la Piratería Financiera especulativa y elitista (los "Mercados") por el otro. 

 

El legado, la responsabilidad y la oportunidad de Europa

También se puede decir, que precisamente Europa tiene la responsabilidad de reconducir ese Produccionismo desmesurado, ya que la propia Europa fue cuna de ello, con la Revolución Industrial al principo del S. XIX, a la vez que fue el mayor beneficiado. Aún más importante es el hecho que Europa haya prosperado en el pasado, gracias a la explotación de colonias en otros continentes durante siglos. Y sigue haciéndolo al día de hoy, aunque ya no bajo un régimen del colonialismo, ni teniendo ya la "exclusiva" de la explotación intercontinental. 

Tal vez ha llegado la hora de que Europa se atreva hacer autocrítica histórica sincera, y vaya reconociendo abiertamente que su riqueza y su bienestar actual, lo debe fundamentalmente a los siglos de explotación de las antiguas colonias, que posteriormente y hasta ahora han quedado sumergido en la más absoluta pobreza y desestructuración, aunque se les denomina "en vía de desarrollo" de esa forma 'políticamente correcto', pero tan completamente hipócrita.

Tal vez es hora que, los que dicen que algunos países dentro la Comunidad Europea hayan vivido "por encima de su capacidad" se atrevan a ser lo suficientmente objetivos y sinceros para hacerse conscientes y reconocer que en realidad toda Europa ha vivido por encima de su capacidad real durante siglos, sobre todo la élite, llegando incluso hasta la decadencia, sólo gracias a esa explotación abusiva e ilimitada de las riquezas y recursos, tanto humanos como naturales, de otros continentes (con América como el ejemplo más grave, donde, en vez de robar las riquezas de aquel continente para "traerlas a casa", un puñado de antiguos Europeos aprovechados "se han quedado" directamente con el continente entero). Porque, siendo objetivo y sincero, queda patente que, con respecto a los recursos naturales propios, Europa es, en realidad, el continente más pobre del planeta. Y lo poco que hubiese, ya fue explotado en los tiempos de los Romanos.

 

Cuna de la democracia

Sin embargo, Europa también es la cuna de la democracia; ese modelo político-social que, por ahora, se ha consolidado como el más justo y a la que todavía aspiran los ciudadanos de muchos países, aunque claro, tal vez ya lo habrían podido alcanzar o, incluso, no lo habrían ni necesitado, si no hubiera sido por esa misma intervención colonialista europea.

 

Europa contra los Paraísos Fiscales, hay que vigilar a los políticos

Lamentablemente, no se pueden cambiar los errores del pasado, pero sí se puede tratar de corregirlos. Y eso, precisamente, está dentro del alcance de Europa, aunque fundamentalmente por parte de sus ciudadanos y no de sus conservadores, lentas y burocráticas instituciones o sus influenciables políticos: lograr que la democracia se haga verdadera - más justa, más transparente, mejor distribución de riqueza y poder... - y que se expanda a otros países.

Las multitudinarias manifestaciones por parte de sendos movimientos sociales y políticos son una clara declaración de intenciones de gran parte de la ciudadanía europea. Unicamente hace falta que este conjunto alcance la masa crítica, para que las autoridades simplemente ya no puedan obviar la opinión pública, como hasta ahora sí suelen hacerlo a favor de los bancos, las empresas multinacionales y los individuos más ricos y poderosos de este planeta.

Y el primer paso fundamental para ello ha sido la anunciada lucha contra los Paraísos Fiscales (Islas del Tesoro), que, si se culmina de verdad, abre realmente la puerta a una sociedad global más justa, tanto para la humanidad, como para el propio planeta en su conjunto. No obstante, es primordial vigilar de cerca a esos políticos y otros involucrados en este proceso, ya que las élites más poderosas y adineradas se emplearán a fondo para infuir en las decisiones políticas o jurídicas con tal de evitar o minimizar cualquier incremento de la transparencia bancaria global.

Hay que tener en cuenta que, de hecho, no ha sido iniciativa propia y voluntaria de los políticos europeos emprender esta nueva lucha contra los Paraísos Fiscales (ya hubo varios intentos), sino que se han visto obligado a ello, después de saltar el Offshore Leaks, la filtración de datos de las cuentas secretas en Paraísos Fiscales de empresas y personas de alto estánding, confirmando también la colaboración de los propios bancos comerciales 'de confianza'Además existe el peligro que los políticos se den ya por satisfecho con tal de eliminar o reducir la evasión fiscal y tal vez sólo para su propio país, mientras lo fundamental es eradicar y eliminar realmente cualquier existencia y rastro de todas las entidades donde se pueden ocultar capitales desconocidas.

La fuerza de las élites globales, para defender su posición privilegiada, necesita ser contrarestada con la misma fuerza que debería consisiter en la demanda incesante del FIN a los Paraísos Fiscales, por parte de todo y cada uno de las ONGs y los movimientos sociales, como primera exigencia en cualquiera de sus expresiones, hasta que no quede ningún lugar en el mundo que ofrezca Secreto Bancario, ni impuestos que sean menos de, por ejemplo, tres cuartos de la media internacional (más simple sería anular los impuestos "especiales" para empresas extranjeras).

Una vez que los flujos financieros globales sean transparentes al 100%, entonces empieza a ser posible que florezca una democracia verdadera a partir de la cual pueda surgir una nueva ordenanza mundial, más enfocada a las personas y los valores humanos reales, que a las entidades y sus valores artificiales y engañosos.

Europa puede y debe dar el ejemplo. Y dar el primer paso!